Estamos a unos días de cerrar el mes de junio y con ello el primer semestre de 2022 y vemos con optimismo que la economía en muchos sectores se ha reactivado; por la misma necesidad general que se tiene después de muchos meses en espera.

 

Este año se han aplicado incrementos salariales en el orden del 6 y 7% para resarcir la inflación de más del 7% que se presentó durante 2021. A esta fecha la inflación anual supera el 7.5% y existe un sentir generalizado de que los aumentos salariales no alcanzan a cubrir una inflación de esa dimensión.

 

El entorno del trabajo se ha globalizado de una manera natural, hay muchos puestos que se vieron forzados a trabajar a distancia por la pandemia, muchos sin condiciones adecuadas, y aun así la adaptación se produjo gradualmente. Algunos colaboradores buscan ya en las ofertas de empleo, que se pueda trabajar en esquema de home office y otros más, demandan estar en contacto con el equipo.

 

 

Actualmente se muestran ofertas de empleo en diversas partes del continente y del mundo, principalmente para puestos de Tecnologías de Información y Marketing Digital, lo que ha provocado que se mejoren las condiciones de los salarios para que los colaboradores talentosos decidan permanecer y desarrollarse en este tipo de organizaciones.

 

La determinación de un nuevo salario mínimo diario aplicable en 2022 de $172.87 en general y de $260.34 para la zona fronteriza, así como la regulación de las empresas de outsourcing, han derivado una serie de medidas que obliga a los patrones a pagar como mínimo más de $5,255 mensuales.

 

 

 

Las empresas que migraron de la subcontratación de personal por outsourcing e integraron a sus trabajadores a un esquema de “contratación tradicional”, han tenido que invertir más recursos para asumir el costo patronal de la integración salarial, brindando mayores garantías a sus trabajadores.

 

Muchas de las empresas que optaron por la modalidad de contratación tradicional, también están pensando en integrar un esquema de prestaciones y beneficios atractivo para sus colaboradores y aunque, en una primera instancia el costo no lo permite, se tiene planeado incorporarlo de forma gradual en la medida que se vayan cumpliendo las metas de negocio.

 

Los aumentos que han tenido los salarios mínimos también han provocado que los puestos operativos o los administrativos de menor nivel tengan un aumento salarial mayor a la inflación para preservar la equidad interna en las organizaciones.

 

Por otra parte, se habla de diferenciar los paquetes de prestaciones y beneficios para colaboradores de distintas generaciones, para atender sus necesidades particulares, con la finalidad de retener talento y segmentar expectativas cada vez más diferenciadas.

 

 

Beneficios como guarderías, salas de lactancia, horario flexible, home office, actividades deportivas y pausas activas son algunos beneficios que eran sólo de las grandes empresas, ahora cada vez más se incorporan a empresas de tamaño intermedio y medianas.

 

Asesoría legal, apoyo psicológico, servicios de mensajería para colaboradores, tintorería y lavandería, snacks saludables, son algunos beneficios que ya se empiezan a integrar de igual forma.

 

Actualmente, ya no se trata de otorgar lo que otros dan, si no de atender las exigencias de los colaboradores que trabajan en una organización de acuerdo con sus circunstancias particulares para mantener un buen ambiente laboral.

 

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